miércoles, 8 de junio de 2011

DE TOROS


   Hace tiempo que no escribo de toros y, finalizada la feria de San Isidro, creo que es  buen momento para hacer un pequeño balance de cómo marcha el ejercicio taurino. Con la conclusión del ciclo madrileño podemos decir que termina el primer tercio de la temporada, sin duda el más interesante al incluir también la feria de Sevilla.

    La temporada de 2011 tiene hasta ahora un protagonista indiscutible: José Mari Manzanares. El alicantino, superada la lesión en la mano que tanto le influyó negativamente y le hizo sufrir el pasado año, ha alcanzado una madurez incontestable y sus éxitos en las dos primeras grandes citas de la temporada le sitúan en el puesto más alto del escalafón. En torno a su presencia se van a articular todas las ferias que restan por celebrar.

    El otro gran protagonista es hasta ahora El Juli y, aunque en Madrid le niegan el pan y la sal, técnicamente sigue a años luz del resto de compañeros y es de los pocos toreros que todavía sorprende y nunca defrauda. La de 2011 es su decimotercera temporada completa como matador de toros y este año, como todos, sigue arriba.

    Y poco más, porque el resto de las principales figuras (Castella, El Cid, Cayetano, Ponce y todos los que quieran añadir) no ha brillado especialmente en este inicio de campaña. Si acaso habría que destacar el chispazo de una gran actuación de Morante en Jerez y, sobre todo, la Puerta Grande de Talavante en Madrid. Un éxito que, en principio, habría que interpretar como el principio de la recuperación definitiva del extremeño.

    A Talavante se le encumbró de forma precipitada y le perjudicó notablemente la continua comparación que algunos medios de comunicación hicieron de forma machacona entre su toreo y el de José Tomás. Tras varias temporadas decepcionantes ha resurgido de nuevo en Madrid. Tiene calidad y hay que darle un voto de confianza, pero mucho me tempo que no está mentalmente preparado para aguantar el tirón.


    En Sevilla y Madrid el público ha respondido; La Maestranza y Las Ventas se han llenado casi todas las tardes, al igual que sucederá el próximo mes de julio en los Sanfermines de Pamplona. A partir de ahí volverá la imagen de las plazas semivacías, tal y como ha sucedido en el primer ciclo de la temporada en Zaragoza en el que el promedio de asistencia apenas ha superado los mil espectadores. Un primer ciclo que habrá que replantearse pues ¿qué sentido tiene programar unos festejos que de antemano se sabe que no interesan absolutamente a nadie? Pues, evidentemente, ninguno.

2 comentarios:

  1. Bastante de acuerdo.Ya tenía yo ganas que Talabante demostrara lo suyo.

    Junkitaurino

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  2. Me alegro mucho por el Juli, seguramente el torero más importante de la historia reciente.

    EL QUE TE DIJE

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